jueves, 8 de agosto de 2013

Apuntes de tierra partida

Un papel poblado de silencios. Un silencio aturdido por preguntas. Una pregunta que taladra y no calla. Calla. La que calla es mi mano, que no encuentra papel ni silencio para retomar la escritura. Esa búsqueda constante que no logra hacer emerger decires en ningún rincón, ensordece.
No logro descifrar si la inquietud me viene por el encierro en hora de atardecer, por un simple tiempo de sequía o por la ansiedad a la que me expone otro día más de búsqueda sin lograr que el grafito llene el papel.
Cuando nada sale, ellxs hablan:
Yupanqui: "No me dejes partir, viejo algarrobo... hay un río profundo que me llama"
Pizarnik: "Pero el silencio es cierto. Por eso escribo. Estoy sola y escribo. No, no estoy sola. Hay alguien aquí que tiembla"