miércoles, 1 de mayo de 2013

Aniversario autobiográfico

Hace un año crucé una frontera dejando atrás búsquedas que ya había dejado y canciones que en mi habían perdido entonación, aunque tercamente la habían seguido buscando.
Desde entonces, hasta hoy, fueron callándose ruidos que me mareaban y naciendo sinfonías que me acobijaban. 
Fue en otoño que lo hoja "muriente" abrigaba la esperanza de los meses por venir. Mientras ella caía, los nacidos dijeron de todo: que se lo imaginaban, que se alegraban, que se asustaban, que confiaban, que... que... Y no faltó quien dijo que me condenaría y se condenarían conmigo los chicos que Dios me había confiado. ¡Anacrónico juicio!
Condenado, y condenándome, la vida me tiene a puro encanto en este pueblo, mi Wirikuta, en tierra de abuelos, en suelo sagrado y en amor profundo.
También hoy es otoño.
Belli: "El árbol ha domado mi propio calendario. El ciclo de otros atardeceres"
Detrás de cada hoja barrida, ya veo las nuevas. Laura, cerca o lejos, hace primaveras.